El cuproníquel, también conocido como cobre-níquel, es una aleación compuesta de cobre y níquel y se utiliza principalmente en diversas aplicaciones marinas debido a su excelente resistencia a la corrosión. Las aleaciones varían en composición desde 90% Cobre y 10% Níquel hasta 70% Cobre 30% Níquel.
El cuproníquel se especifica comúnmente en intercambiadores de calor o tubos de condensadores en una amplia variedad de aplicaciones marinas, como enfriamiento de agua de mar, sentinas y lastre, sanitarios, extinción de incendios, gas inerte, sistemas de enfriadores hidráulicos y neumáticos, plantas de desalinización, plataformas de petróleo y gas en alta mar, turbinas de vapor condensadores, precalentadores de alta presión en plantas de energía nuclear y de combustibles fósiles y en los cascos de barcos y embarcaciones, así como algunas monedas.
El cuproníquel tiene una temperatura de fusión de 1170 - 1240C (2140 - 2260F).